El arduo camino hacia ‘Furiosa’ estuvo lleno de desvíos
Para George Miller, Anya Taylor-Joy y su equipo, una serie de desastres naturales hizo que la producción fuera ardua.
En el mundo duro y postapocalíptico de “Mad Max”, nada es más preciado que el agua y la gasolina. Pero para hacer realmente las películas de “Mad Max” se necesita una mercancía aún más rara: fe.
Charlize Theron y Tom Hardy, quienes lucharon durante la difícil y caótica realización de “Mad Max: Fury Road” en 2015, dijeron después que desearían haber confiado más en la visión del director, George Miller. Las personas que aprobaron “Fury Road” tampoco la entendieron completamente: los ejecutivos de Warner Bros. volaron a Namibia, el lugar del rodaje, y exigieron que Miller cesara la producción antes de que la película estuviera completa, luego realizaron una edición alternativa en un intento de socavar el corte final de Miller.
Contra todo pronóstico, Miller pudo lanzar una obra maestra única en su tipo, ganadora de un Oscar. Ahora, ha regresado con “Furiosa: A Mad Max Saga”, una precuela de “Fury Road”, que se estrenó el miércoles por la noche en el Festival de Cine de Cannes y se lanzará en los cines el próximo miércoles.
¿Sintió Miller el viento a su favor mientras hacía “Furiosa”, ya que la recepción de “Fury Road” vindicó su visión?
“‘Furiosa’ fue tan difícil en muchos aspectos diferentes como ‘Fury Road’”, dijo Doug Mitchell, quien produjo ambas películas.
AUNQUE MUCHAS PRECUELAS son concebidas apresuradamente para ampliar una franquicia exitosa, “Furiosa” ha estado gestándose durante casi dos décadas. Cuando una encarnación de 2002 de “Fury Road” que debía protagonizar Mel Gibson se desmoronó en la preproducción, Miller y su coguionista, Nico Lathouris, pasaron los siguientes años profundizando en los personajes, ideando una historia de fondo tan sólida para Furiosa que antes de darse cuenta, habían escrito un guion. A diferencia de “Fury Road”, que transcurre en tres días cargados de adrenalina, “Furiosa” abarca 15 años y sigue a Furiosa desde la infancia, cuando es secuestrada por una banda de motociclistas, hasta la adultez, cuando trama su venganza mientras trabaja como conductora de un War Rig para el dictador Immortan Joe.
Con el animador japonés Mahiro Maeda, Miller exploró inicialmente la posibilidad de convertir el guion de “Furiosa” en una película de anime. Los retrasos archivaron esa idea, pero incluso cuando salió “Fury Road” y reavivó el interés en la franquicia, el futuro de “Furiosa” seguía siendo muy incierto: dos años después del estreno de “Fury Road”, en un momento en que muchos directores estarían ocupados preparando una nueva entrega, Miller y Mitchell demandaron a Warner Bros. por ganancias no pagadas relacionadas con “Fury Road”.