Japón prueba la primera batería recargable basada en uranio

Células de desechos nucleares? ¡Sí, es posible! El primer prototipo se ha propuesto en Japón.
Los ingenieros interesantes dicen que un equipo de investigadores en Japón usó uranio para crear la primera batería recargable del mundo, una innovación que podría cambiar el almacenamiento de energía y la gestión de residuos nucleares. Esta tecnología prometedora proporciona una nueva vida para el uranio pobre, y hasta ahora no ha habido un desperdicio de mucho uso.
Uranio en lugar de litio: un nuevo paradigma de energía
Por lo general, las baterías se basan en litio o conducen a materiales como la generación de energía. Sin embargo, en este proyecto, los investigadores japoneses han demostrado que el uranio puede usarse como material activo en las reacciones electroquímicas de la batería. El prototipo creado era de tamaño pequeño, de 10 cm de ancho y 5 cm de alto, pero logró alcanzar un voltaje de 1.3 V, cerca de la batería alcalina estándar (1.5V). Además, la batería se cargó y descargó 10 veces sin una pérdida significativa de rendimiento.
Este descubrimiento ofrece nuevas posibilidades para el uso de uranio, un material que a menudo se considera un problema de gestión de residuos. Japón posee aproximadamente 16,000 toneladas de dichos materiales, y a nivel mundial, la acción alcanza 1.6 millones de toneladas.
Posibles soluciones rentables para almacenar energía renovable
Además de repetir los materiales controvertidos, las baterías a base de uranio también pueden conducir a un equilibrio de fluctuaciones de la red basadas en la energía solar y eólica, proporcionando soluciones efectivas para almacenar energía excedente. Los investigadores ya están en una versión mejorada: batería de flujo redox, que permitirá una mayor capacidad de almacenamiento y una transmisión de energía más eficiente.
Sin embargo, hay desafíos. Debido a la radiactividad inherente del uranio, estas baterías solo pueden usarse en entornos controlados, como las centrales nucleares.
La creciente demanda de baterías recargables generadas por la transición a fuentes de energía renovable se ha convertido en una de las innovaciones más interesantes en el espacio de almacenamiento de energía. Si la tecnología se puede escalar e implementarse de manera segura, el futuro de la energía sostenible puede obtener impulsos inesperados del uranio.