Según los informes, los guardaespaldas del presidente ruso Vladimir Putin llevaron una “maleta de caca” especial para recoger sus desechos fecales durante su cumbre con el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, en Alaska, el viernes, según los informes.Se dice que la medida de seguridad inusual está dirigida a evitar que las potencias extranjeras obtengan información confidencial sobre la salud de Putin. “Los guardaespaldas de Putin recolectan sus desechos fecales y los traen de vuelta a Rusia cuando el líder viaja al extranjero”, informó el Express, citando a los periodistas de investigación Regis Gente y Mikhail Rubin. Los periodistas afirmaron que los miembros del Servicio de Protección Federal (FPS) del presidente ruso almacenan sus desechos en bolsas especiales y los transportan en maletines dedicados.Según el Express, esta práctica se remonta varios años, incluida la visita de Putin 2017 a Francia. La ex periodista de la BBC, Farida Rustamova, también informó que existían precauciones similares durante su viaje a Viena, cuando el líder ruso usó un baño portátil.Rustamova dijo que una fuente confirmó que la práctica ha estado vigente desde que Putin asumió el liderazgo en 1999.Los informes sobre la salud del presidente de 72 años han alimentado durante mucho tiempo la especulación. Durante una conferencia de prensa en Astana, Kazajstán, en noviembre del año pasado, Putin fue visto sacudiendo las piernas, planteando preocupaciones. El Dr. Bob Berookhim sugirió que pudiera estar vinculado a una afección como la enfermedad de Parkinson, según los Express US. Putin también fue observado contrajeciéndose mientras se reunía con el presidente bielorruso Alexandr Lukashenko en 2023. Reclamaciones adicionales citadas por el Express sugirieron que Putin pudo haber sufrido un paro cardíaco en el pasado, requiriendo cuidados intensivos en su residencia oficial.Los informes de la “maleta de caca” surgieron cuando Putin conoció a Trump en Alaska para las conversaciones de paz sobre el conflicto de Ucrania.